Autor: Daoud Sarhandi Williams
Este libro cuenta con el apoyo de la Asociación Open Art en colaboración con Rupert Wolfe Murray.
Memoria gráfica de la guerra de los Balcanes, a 30 años de su historia. Un documento único e imprescindible sobre este conflicto bélico. El autor de este libro es Daoud Sarhandi Williams, destacado cineasta y escritor británico reconocido en la esfera de cine internacional.
Publicación en la revista Art Work de Edimburg, Reino Unido
PRESENTACIÓN EN KIEV, UCRANIA
16 de agosto 17h. en la Universidad Nacional: Mohyla Academia de Artes, Kiev
PRESENTACIÓN EN SARAJEVO, BOSNIA
09 de julio en Bookstan Festival
Organiza: Blow Up Agency and Bookstan Festival, Colabora: Open Art, Open Books
Invitados a la presentación: Bojan Hadžihalilović y Amila Handžić Ferović.
DESCRIPCIÓN
Bosnian War Posters es una compilación única de carteles y diseño gráfico de ámbito político. Incluye fotos de archivo clave de la guerra, así como nuevas fotos que ponen todas estas imágenes en contexto a día de hoy.
El libro ilustra todo el conflicto: desde abril de 1992, cuando se dispararon las primeras armas en Sarajevo, hasta diciembre de 1995, cuando se acordó la paz en Dayton, Ohio. Las imágenes que siguen retratan el período de reconstrucción tras la contienda y la búsqueda de los criminales de guerra. Los carteles se recopilaron en Bosnia y en la antigua Yugoslavia poco después de que terminara la guerra. Juntos forman la única gran colección panbosniana que existe de material de este tipo, que da cuenta de la guerra desde los ojos de aquellos que padecieron todos sus horrores.
Bosnian War Posters se trata de un estudio gráfico único del conflicto europeo más sangriento desde 1945 y encandilará a todos aquellos interesados en el diseño gráfico, el cartelismo, la trágica historia de Yugoslavia y las políticas nacionalistas de la era contemporánea.
El autor de BOSNIAN WAR POSTERS es Daoud Sarhandi, un premiado cineasta y escritor británico. El libro cuenta con nuevos prefacios, escritos por Carol Wells, fundadora y directora del Center for the Study of Political Graphics (CSPG) en Los Ángeles, y Bojan Hadžihalilović, uno de los fundadores del grupo de diseño Trio en Sarajevo.
RESEÑAS
Un libro tan bonito como aterrador. La introducción que nos ofrece Sarhandi es uno de los mejores resúmenes acerca de la historia del conflicto. Y, por si fuera poco, nos presentan los carteles. Con ellos percibimos el poder, casi sin mediación, que tiene la propaganda política y la repercusión emocional del arte político cuando reina el terror. Los carteles nos hablan como si estuviéramos ahí, presentes, como si fuéramos capaces de alistarnos al ejército o de resistir.
LOS ANGELES TIMES
Este libro es sin lugar a dudas una de las obras más importantes acerca de la Guerra de Bosnia y es probablemente el último documento que trata el tema de la propaganda bélica del siglo pasado, de un tiempo donde no había internet, ni TikTok, ni noticias falsas.
Bojan Hadžihalilović.
Cofundador del estudio de diseño Trio, creado en Sarajevo en 1985
La obra contribuye significativamente al conocimiento que se tiene sobre la guerra en Bosnia-Herzegovina. También es un ejemplo del valor que tienen los carteles como evidencias directas de carácter histórico. La mayoría de los libros sobre carteles utilizan ilustraciones para presentar su propia perspectiva, pero este libro los utiliza para exponer la complicidad del conflicto y la fluidez de los bandos. La obra es una lección importante para poder entender los movimientos sociales y las guerras, o cualquier otra cosa del estilo. Utiliza los carteles de la misma manera que los utiliza el CSPG.
Carol Wells
Directora del Center for the Study of Political Graphics (CSPG) de Los Ángeles
El autor y cineasta Sarhandi (también autor de la obra Evil Doesn’t Live Here) nos ofrece una historia poco común de la Guerra de Bosnia (1992-1995), centrada en los carteles de propaganda que fueron creados y distribuidos por varios participantes en el conflicto. Teniendo en cuenta que los carteles «eran una forma barata y efectiva de difundir información» en un momento en que los medios normales de comunicación se habían interrumpido y la mayoría de las noticias se transmitían de boca en boca, Sarhandi nos cuenta cómo algunos «grupos ideológicos rivales» acababan con el trabajo de otros y nos traza un perfil de los miembros del estudio de diseño Trio en Sarajevo, del Foro de Ciudadanos de Tuzla y de otros colectivos de activistas. Nos explica con lucidez las complejas divisiones de carácter político, religioso y étnico presentes en los Balcanes y nos describe a grandes rasgos cómo el surgimiento de partidos de corte nacionalista en Serbia y Croacia contribuyó al conflicto. Pero son la presentación y el análisis que se hace de los carteles las características que hacen que el libro brille por sí mismo. Para manifestar sus ideales, los artistas se apropiaron de imágenes de la Guerra Civil española y la Segunda Guerra Mundial e hicieron reformulaciones de iconografía comercial, como Mickey Mouse o Coca-Cola. Las leyendas explican con todo detalle el significado y el trasfondo de cada obra de arte y arrojan luz sobre los orígenes del sentimiento antimusulmán en Croacia, sobre las atrocidades del asedio de Sarajevo y sobre cómo los nacionalistas serbios usaron imágenes de la Guerra de Vietnam para advertir a los EE. UU. de que se mantuviesen al margen del conflicto”. Esta obra, de presentación bellísima y riguroso detalle, es una forma cautivadora de contemplar el arte propagandístico.
Publishers Weekly
ENTREVISTA CON DAOUD SARHANDI
Autor del libro Bosnian War Posters
Los carteles únicos que produjo la Bosnia en tiempos de guerra
14 de febrero de 2022 | Lectura de 6 minutos |
Rupert Wolfe-Murray descubre que, durante la Guerra de Bosnia, los carteles eran la única forma en que los artistas de Bosnia y Herzegovina podían manifestarse en contra de lo que estaba sucediendo.
Estoy trabajando en un libro estupendo que saldrá en mayo de este año: Bosnian War Posters, de Daoud Sarhandi.
Es una colección increíble de materiales de propaganda y arte que Daoud y Alina Wolfe-Murray, mi exmujer, recopilaron justo después de la guerra en Bosnia y Herzegovina. Este proyecto ha tardado mucho en cobrar vida, pero esa es otra historia.
Los carteles están ordenados cronológicamente, con largas leyendas, y cuentan la historia de la Guerra de Bosnia. La gente joven de Bosnia y Herzegovina parece estar especialmente interesada en este tema, ya que no aprenden sobre la guerra en el colegio porque se considera algo demasiado reciente, demasiado crudo, o demasiado politizado, y quieren aprender sobre ella para poder evitar los errores que cometieron sus padres. A los jóvenes bosnios también les interesa ver cómo se comunicaba la gente antes de internet.
Muchas de las personas mayores de Bosnia que he conocido, aquellas que han vivido la guerra, no parecen estar muy interesadas en la contienda; o bien quieren olvidarla, o bien no se les va de la cabeza (o al menos eso me han dicho).
La razón por la que estoy preparando este artículo es porque recibí unos mensajes de audio muy inspiradores del autor del libro por WhatsApp. El mensaje de audio de Daoud (que transcribo a continuación) me dio la idea que había estado buscando y responde a la pregunta que me he estado haciendo últimamente: ¿qué hace que nuestro libro, Bosnian War Posters, sea único?
El lugar correcto en el momento adecuado
Esto es lo que me dijo Daoud:
«Con lo de Yugoslavia se habían alineado todos los astros. Estábamos en el lugar correcto en el momento adecuado, en un país con una memoria o una historia de diseño consciente, conectada con Europa y Rusia. Uno de nuestros colaboradores, Bojan Hadžihalilović, dice que la guerra ocurrió justo antes de que internet y las redes sociales se hicieran tan prominentes. Creo que las grandes campañas de carteles que se podían ver en el pasado ya se han acabado. Puede que la Guerra de Bosnia haya sido la última en usar carteles para tal efecto.
«Algunos artistas, como Began Turbić y Asim Đelilović entre otros, son de gran valor, ya que sus carteles y conceptos son originales, únicos y creados por ellos mismos. Hace poco estaba pensando en crear un libro similar sobre la Guerra Civil española, ya que algunas de las obras se han dibujado y diseñado de una manera bellísima. Sin embargo, los carteles de la Guerra Civil española los produjeron agencias de propaganda de ambos bandos en lugar de artistas particulares. Producían cosas muy predecibles y la verdad es que con este material se aprende bastante poco de la guerra en general o de lo que la gente realmente sentía. No obstante, este no es el caso de los carteles que encontramos en Bosnia y Herzegovina. Creo que el trabajo de Began Turbić, por poner un ejemplo, es impresionante en comparación con todo lo que salió de Barcelona o Madrid.
«Además, los únicos carteles de la Guerra Civil española que han sobrevivido vienen de las ciudades que se conquistaron. Casi no queda nada que venga de sitios más pequeños ni de la izquierda independiente. Esto no ocurre con el material que encontramos en Bosnia y Herzegovina, ya que pudimos visitar lugares muy remotos justo después de la guerra, así como a decenas de artistas particulares.
«Lo que encontramos fue algo realmente único. No solo para Bosnia y Herzegovina, sino también para el patrimonio mundial. No se me ocurre ninguna otra guerra en la historia que haya generado una herencia tan rica de arte de carteles originales, y lo más interesante es que ha sido una creación verdaderamente independiente, pues la mayoría de las obras que recopilamos fueron producidas por artistas particulares, que trabajaban solos, y que parecía que el gobierno y el ejército ignoraban. Eso fue un momento en la historia que no va a volver. Fue algo que no ocurre en todas partes y que probablemente no vuelva a suceder.
«Estoy muy pero que muy orgulloso de Bosnian War Posters. El libro es precioso y nos las arreglamos para rescatar gran parte de la experiencia que vivieron los bosnios durante la guerra, que sin lugar a duda se habría perdido de no ser por el libro. Hasta donde yo sé, nosotros éramos los únicos que estaban recogiendo todo este material de forma sistemática. Creo que la gente de Bosnia no apreció el valor que esto tiene, además de que estaban agotados tras el conflicto. Ya habían tenido suficiente de todo este lío. A veces, los de fuera ven cosas que la gente de ese sitio no ve. Por eso, la distancia es una ayuda. Desde el principio sabía que todo esto era muy especial y me alegro de haber ayudado a preservar esta parte de su patrimonio cultural.»
Escuela de Arte de Sarajevo
Los artistas de Bosnia y Herzegovina pudieron aprovechar esta rica historia de arte antiguo y moderno porque muchos de ellos habían recibido una educación clásica en la renombrada Escuela de Arte de Sarajevo, donde se estudia el arte más significativo durante años. Hace poco tuve la oportunidad de ir a esta escuela y vi que todavía está en pleno vigor y que los estudiantes que pude conocer tienen muchas ganas de ver nuestro nuevo libro sobre los carteles de la guerra.
Lo que yo interpreto de estos carteles de la Guerra de Bosnia es que era la única manera en que los artistas de Bosnia y Herzegovina podían manifestarse en contra de lo que estaba sucediendo. Como el acceso a la electricidad estaba muy restringido, la radio era el único medio de comunicación al que podían acceder ocasionalmente.
Esta escasez hizo que los carteles como medio de comunicación fueran aún más poderosos. Esto no fue así para los otros bandos del conflicto, Croacia y Serbia, que tenían sistemas de propaganda nacional y medios de comunicación de masas en completo funcionamiento.
Aunque recogimos algunos carteles de estos países, la producción de carteles en tiempos de guerra era muy escasa, puesto que realmente no los necesitaban. No obstante, tenemos algunos del comienzo de la guerra en Croacia y algunas portadas de revistas interesantes de Belgrado.
Lo que yo no apreciaba hasta hace muy poco era el nivel de libertad que tenían los artistas bosnios para expresarse, lo cual me parece irónico teniendo en cuenta que el pueblo bosnio estaba efectivamente acorralado geográficamente por sus enemigos.
Estaban encarcelados por fuerzas externas, pero sus espíritus eran libres.
La versión completa del artículo de Rupert Wolfe-Murray sobre el proyecto de Bosnian War Posters puede leerse a través de este enlace. (Lo hemos vuelto a publicar nosotros, con el permiso pertinente, de forma abreviada).
Pronto se lanzará una convocatoria de crowdfunding para ofrecer copias del libro con descuento a los bosnios, vivan donde vivan. Si quiere obtener más información acerca de Bosnian War Posters, puede seguir el hashtag #bosnianwarposters en Instagram.
La fotografía junto al título de este artículo fue producida por Trio Studios durante la guerra. Es una reinterpretación del símbolo de Coca-Cola y está impresa en la parte trasera de un viejo mapa del ejército, debido a la escasez de papel.
Traducción por Ana B. Vela